miércoles, 4 de noviembre de 2009

Despojados

Nos quitamos las ropas
con ellas nuestros pecados
nuestros miedos
y nos quedamos entregados
a la espera de lo que llegará
de lo que no fue,
de lo que pudo ser.
Nos volvemos a escudar,
pensamos que el roce
de nuestro verdadero ser puede ser peligroso,
porque entran en juego nuestros sentimientos
nuestro cuerpo se estremece
la adrenalina sube,
el frío del momento antes del salto,
el calor del arrebato
y las imagines desaparecen,
las ideas entremezcladas
y ese nuevo sentimiento de locura insensata;
todo ello por el roce de tu piel con la mía
de tus ojos disimulados
posados en el contorno de mi figura
o el simple recuerdo
de tu respiración posándose en mi frente,
cuando estamos juntos en ese arrullo
que nos llevó la noche y la mañana
mientras nuestros sueños se entrecruzaban.
La vivida imagen de tus labios,
de tu mirada,
de tus manos rodeando mi cuerpo
en el tierno abrazo de un adiós
y ese dulce beso,
que dudaba entre el precipicio
de desaparecer
o quedar en el recuerdo.

domingo, 1 de noviembre de 2009

Esconde tu llanto

Llanto escondido
llanto incomprendido
gota derramada
por capricho del alma
gota imaginaria
susurro del corazón
espejo de nuestros miedos.
Entrecortada
por el suspiro del pasado,
de lo olvidado y recordado
gota perdida
en el surco de tus ojos
por la comisura de tu boca
que sala tus poros
que condimenta la mentira.
El engaño de la perfección
se revela
con cada gota que se desliza
con cada gota que es atrapada
por la mirada de otro
por el reflejo de nuestros males
llevándonos al acto compulsivo
de escondernos
de limpiarnos
sacarnos las sales
que infectan nuestro organismo
volviéndonos a mentir
creyendo en el engaño
volviendo a vivir